"Sin título" por Eddy Whopper
Papá decía que nos portábamos mal.
Así que un día se sentó en la cabecera, como siempre; pero con el cinturón colgado del cuello.
“A la primera, va con la punta. A la segunda, con la hebilla”. Nos reímos; entonces, papá se puso de pie y dio un cintazo plano sobre la mesa, que estaba servida.
Mamá no alcanzó a acariciarlo. De otro hebillazo, saltaron los vasos, la jarra de agua.
Nos acomodamos en silencio, entre la comida desparramada y muchos pedacitos de vidrio. La botella de vino, tumbada cerca de mi plato, volcó sangre hasta que alcanzó una especie de equilibrio. Un charco avanzaba sobre el pan. Miré a mamá, pero ella no. Los cubiertos se habían deshermanado.
Comí con la vista puesta en él. Noté, por ejemplo, cómo hacía entrar los bocados con un chicotazo corto, pocos centímetros antes de la boca. La servilleta se había empapado. Mamá también tomaba la comida en silencio. Nadie miraba a nadie, pero yo lo miraba a él.
-Qué pasa –dijo.
Ahora entiendo que la ajenidad del amor enloquece; sin embargo, cada vez que alguien me humilla, vuelvo a aquel silencio, quizás a la espera de que mamá quiera decirnos algo.
- ilustración digital, 2019.
http://andrescasciani.com/
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